Viaje a Helsinki: día 7. The end.

Amanecimos en nuestro último día en Helsinki con la agenda previamente establecida para que nuestro viaje de vuelta discurriera sin sobresaltos. Con la maleta prácticamente hecha desde el día anterior, desayunamos por última vez en el Sokos Presidentii. La sensación en este tipo de viajes es extraña; cuando llegas parece que tienes toda una semana por delante, y cuando te quieres dar cuenta ya estás recogiendo otra vez.

La obtención del certificado del curso organizado por English Matters implicaba exponer la presentación citada en la entrada anterior del blog. Y así lo hicimos, y Miguel una vez más asombró a la audiencia con su inglés exquisito.

Aprovechamos para agradecer a todas las personas que han colaborado con las fotografías para adivinar las nacionalidades en Instagram (juego difícil, ¿cuántas has acertado? Puedes responder a esta pregunta en Instagram). En cierta medida esta sencilla iniciativa ha dinamizado el grupo en Helsinki  y conectado diferentes nacionalidades. Y por ello Stephanie, una de las organizadoras de English Matters (y participante en el juego de las fotos), nos dio las gracias. También nos ha parecido que la organización de este curso a cargo de esta empresa ha sido muy profesional, y aunque siempre hay margen de mejora, ha cumplido de sobra con nuestras expectativas. 

No podíamos dejar pasar la ocasión para dejar nuestro sello, y cuando presentamos nuestro trabajo y nos dieron nuestro certificado, volvimos de nuevo al auditorio pero con un estilismo que incluía esas camisetas de colores que tanto nos gustan en Alcántara cada viernes primero de mes.

Al situarnos en nuestros asientos de nuevo, vimos una tableta de chocolate finlandés  que nuestros amigos maños nos habían dejado a cambio de nuestras chapas: no hacía falta hombre. Buen grupo de “extremaños” hemos hecho.

En el transcurso de esta última jornada hubo lugar para más intercambios de teléfonos y emails y para compartir deseos de poder colaborar de alguna manera en proyectos futuros. Es increíble la enorme energía colaborativa que se desprende en este tipo de eventos. Solo por eso merece mucho la pena el esfuerzo que supone salir de tu rutina y de tu comodidad diaria para intentar mejorar tus capacidades profesionales y que repercutan en tus alumnos. Obviamente la semana la hemos aprovechado para empaparnos todo lo que hemos podido de esta experiencia finlandesa en todos los sentidos, también culturales y lúdicos, pero a los escépticos de este tipo de experiencias les podemos asegurar que no han sido para nada unas vacaciones.  

Después de unas cuantas despedidas y de incontables “nice to meet you” pasamos por la capilla del silencio: una “iglesia” aconfesional donde una persona de cualquier religión o atea puede pasar y meditar completamente en silencio, en un espacio rodeado por un ambiente totalmente urbano y ruidoso. Curiosa construcción.

Finalmente después de comer en nuestro restaurante de cabecera estos días, nos desplazamos al aeropuerto, ya con destino a España. Es bonito conocer sitios, gente, experiencias… pero también es bonito volver. Goodbye Helsinki, welcome Spain! 

Seguimos trabajando, ¡seguimos aprendiendo!

Pd. Una nueva foto de animales. 

Solución: Muchos habitantes de Finlandia vivían en entornos rurales y eran analfabetos. Cuando se desplazaban a la ciudad era frecuente que se perdieran cuando tenían que localizar alguna calle en concreto. Es por eso que incluyeron imágenes de animales que les ayudarán a “geolocalizarse”. Y es esa la razón por la que en el distrito más antiguo de Helsinki podemos encontrar varias calles con las imágenes de animales que has podido ver estos días.